Ni nos domaron, ni nos doblaron ni nos van a domesticar
Triste noticia lade hoy: la muerte de Marcelino Camacho ha dejado un vacío enorme en la defensa de los derechos de los trabajadores. Esta mañana, mientras escuchaba la noticia en la radio, le tildaban de defensor de un sindicalismo de otro siglo, como si fuera algo despectivo.
Y yo pienso, que gracias a gente como él, a luchadores así (recordemos que le convocó la primera huelga general de la democracia nada más y nada menos que al otrora todopoderoso Felipe Gonzalez) se ha conseguido el estado de bienestar del que ahora disfrutamos nosotros y que nos quieren quitar. Y si nuestros representantes sindicales actuales tuvieran un mínimo de ganas de trabajar como él lo hizo por los curritos que, a fin de cuentas, somos los que levantamos el pais, el partido tendría otro resultado.
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